Confieso que soy incapaz de entender lo que ocurre en mi querida España ¿tan escasas son mis neuronas? ¿será demencia senil aguda?
El “trío de la bencina” que pretende incendiar España (Foto de Internet) |
En estos momentos, cuando me he puesto a pulsar (o aporrear, según se mire) el teclado del ordenador, ya se empieza a oír en Barcelona el rebuzno de los manifestantes que tiempo atrás tomaron como divisa el “burro catalán” en contraposición del “toro español”, para celebrar el Día Grande de Cataluña (la DIADA) que conmemora una derrota militar de la postura de un bando de los españoles, el que defendía las aspiraciones del Archiduque Carlos pretendiente de la Casa de Austria para reinar en España (con el auxilio de la “ladrona” Inglaterra que aprovechó el viaje para quedarse con Menorca y Gibraltar), frente a la Casa de Borbón, auspiciada por el rey francés Luis XIV que esgrimía los derechos de su nieto Felipe por ser bisnieto del rey de España Felipe IV. Una y otra potencia europea (Inglaterra y Francia) iban a “lo suyo”: manejar, influir o mangonear en nuestro reino y en las extensas posesiones europeas, americanas y asiáticas que a principios del siglo XVIII aún ostentaba el decadente imperio español.
Mi primera pregunta (y extrañeza) es que si una derrota para los catalanes separatistas es su DÍA GRANDE, cómo rotularán SU DÍA PEQUEÑO que todo país tiene, aunque estos aficionados de chulos ostenten una plaza denominada DE LAS GLORIAS CATALANAS (¿qué glorias?), y estén en vías de encabezar otras vías públicas con el mote de UNO DE OCTUBRE, fecha en la que dicen fueron aporreados por la policía española ¡¡Masoquismo o locos de atar o ambas cosas!! De lo que no cabe la menor duda es que ese pueblo separatista es un pueblo perdedor desde el primer pulso que le echó a España allá por 1640. Y, el profusamente homenajeado Casanovas, Conseller en Cap de la Generalitat el 11 de septiembre de 1714, herido levemente en una pierna, se hizo pasar por muerto para no ser detenido huyendo a Francia pese a haber luchado contra los franceses (Puigdemont tomó ejemplo de él y llegó incluso más lejos: hasta Bélgica), en donde permaneció hasta ser indultado por Felipe V. Al volver a Barcelona se dio de alta en el Colegio de Abogados ejerciendo la abogacía hasta su fallecimiento, sin enterarse de que siglos después iba a ser un héroe por la independencia de Cataluña cuando solo pretendió ser un buen patriota español que no quería que la Patria (España) cayera en manos de los centralistas Borbones.
Rafael de Casanovas el “héroe” que enseñó a huir a Puigdemont (Foto de Internet) |
BILDU ha anunciado a bombo y platillo que la vuelta ciclista que hoy pasará por tierras del norte de España no rodará por tierras españolas sino por Euskal Herría; no habrá banderas bicolores ni carteles en castellano ni se hablará en ese “desconocido y minoritario idioma” sino en otro que se llama “euskera” que es dominado hasta por los esquimales del Polo Norte. Bueno, es normal que un partido político que se titula como separatista y cuyos predecesores (muchos de ellos todavía en “activo” como el secuestrador Otegui) se hubieran dedicado a conseguir la independencia poniendo bombas, matando con tiros en la nuca, secuestrando y realizando otras actividades del mismo cariz macabro para instaurar un estado comunista en aquellas bellas tierras vascas. Lo que no sería normal, sino que entraría de lleno en un “delirium tremens”, es que el Gobierno de la Comunidad Autónoma hiciera esas manifestaciones y además encabezara una marcha con su presidente al frente, que es un funcionario del Estado con nombramiento en el BOE, pidiendo la independencia del País Vasco y la libertad de “sus presos terroristas”.
¿Dónde estás BILDU, que no te veo? La Vuelta ciclista a su paso por el País Vasco (Foto de Internet) |
Un Partido Político, en aras a eso que ahora domina y amordaza a la ciudadanía y que se llama la “libertad de expresión” (solo para la izquierda y para los separatistas) y “políticamente correcto” (para que las derechas se la cojan con papel de fumar) puede pedir hasta que se ponga puerto de mar a Madrid o que el río Ebro pase por Murcia tan necesitada del agua que allí sobra), algo que no puede hacer el Gobierno de una Comunidad Autónoma o el del Estado a los que se les supone sentido común que les debe impedir (no solo por exigencia de lo dispuesto en las leyes) que se incurra en charlotadas como podían ser ver a los miembros de la Casa Real manifestándose en contra de la Monarquía, al Presidente Pedro Sánchez bajo una pancarta pidiendo la liquidación de la Nación o a la Ministra de Defensa (bueno, de esta se puede esperar cualquier extravagancia) dando mítines para disolver las Fuerzas Armadas... Es obvio que (a no ser que estemos locos) los corderos no pueden postularse a favor de los lobos ni los policías amparar a los delincuentes en vez de detenerlos.
Pues bien. Eso es lo que está ocurriendo hoy en Barcelona. Un Presidente autonómico (Joaquín Torra Pla), funcionario del Estado español, con su nombramiento en el BOE firmado por el Rey Felipe VI y refrendado por Mariano Rajoy, sale a la calle ostentando tal condición institucional exigiendo la implantación de la República catalana (votada ilegalmente el 1 de octubre de 2017), la libertad de los presos que delinquieron al llevar a cabo los actos para sustraer una porción territorial del conjunto de España y reafirmando que van a continuar (sus correligionarios) hasta conseguir sus propósitos de los que no desisten porque están dispuestos a llegar hasta el final ¡¡Y todo esto, lo repite una y otra vez, en su calidad de President, no como persona particular (no puede serlo) ni como dirigente de un Partido!! Y los bobalicones traídos en centenares de autobuses desde los pueblos de la “Cataluña profunda”, con el bocadillo y la camisera con el lema “DIRECTOS A LA CUMBRE”, se lo pasan en grande con el gratis total y la excursión dejándose engañar como el pasado año por unos dirigentes que, por ahora, llevan mucho cuidado en no pasar de las palabras a los hechos por miedo de ir a hacer compañía a sus predecesores en las cárceles en que están “alojados”.
Miquel Roca, uno de los “padres de la Constitución (Foto de Internet) |
Nunca he sido un experto penalista (lo he dicho en otras ocasiones) y además el actual Código Penal no es el que estudié en mis años mozos. No obstante parece obvio de toda obviedad que la conducta del President Torra (hoy y desde que accedió al cargo con una rara formula de promesa en la que no acataba, pero tampoco rechazaba, la Constitución) se halla dentro de lo que el artículo 17 del texto punitivo califica como de conspiración y proposición para delinquir (cometer los delitos de rebelión o sedición) e incluso la conducta provocación pública de llevar a cabo tales ilícitos penales (artículo 18), con el agravante de ser funcionario público (artículo 22-7º). Me parece que con esos “mimbres” se puede componer el “cesto” de la acusación del President y sus sicarios, para evitar que el tema vaya a mayores como pasó en septiembre-octubre de 2017. Solo se necesita voluntad política de que España no se fracciones (serviría de “aviso de navegantes” para otros separatistas). Si esa voluntad no existe debido a que el Gobierno “simpatiza” con el independentismo (por aquello de que España es una Nación de Naciones) se puede convertir (Pedro Sánchez y su equipo del PSOE) en cómplice y cooperador necesario para que la ruptura se produzca.
La lectura atenta de la prensa catalana en estos últimos días me lleva a la conclusión de que entre Pedro Sánchez y Joaquín Torra se ha establecido un “hilo” (no muy fuerte todavía) de entendimiento para que se pueda realizar un referéndum de autodeterminación en Cataluña, con el señuelo apuntado por Miquel Roca Junyent de que se puede hacer sin incurrir en inconstitucionalidad, siempre que a esa consulta NO SE LE DE CARÁCTER VINCULANTE. La trampa es “mortal de necesidad”. Un referéndum autorizado por el Estado mediante una Ley (lo legaliza) y un resultado favorable a los intereses de los separatistas (ya se encargarían ellos de que lo fuera) sería el respaldo, la carta de presentación ante los organismos internacionales, de que Cataluña está oprimida, sometida al Estado por la fuerza, y el carácter “no vinculante” sería agua de borrajas. Si el paripé del uno de octubre, plagado de ilegalidades e irregularidades lo tienen (los separatistas) como la piedra filosofal para exigir la independencia pese a no haber sido homologado ni admitido por ningún país del mundo, qué no harían con los resultados de esa “consulta” que se está amañando bajo cuerda.
Borrell, en su despacho de Exteriores, con la Bandera Nacional, tras realizar las declaraciones a las que los separatistas se cogen como “clavo ardiendo” (Foto der Internet) |
¡¡Éramos pocos y parió la abuela!! Lo digo porque el socialista que la Derecha aceptó (JOSEP BORRELL FONTELLES) como persona sensata que podía moderar el presunto radicalismo de Pedro Sánchez y actuar de bisagra ante sus paisanos catalanes que precisamente en su pueblo de nacimiento (la Pobla de Segur) le quieren quitar su calle (el nombre) por estar al lado de la Sociedad Civil Catalana, nos sale ese día 11 de Noviembre, con unas declaraciones a la BBC inglesa, en la que afirma desde su puesto institucional de Ministro de Asuntos Exteriores del Reino de España, que Cataluña es una Nación, y que no le gusta que los políticos estén presos, pues preferiría que estuvieran en libertad y con otras medidas cautelares diferentes a la prisión incondicional. Suponemos que no se dicen tales barbaridades sin “permiso” del Jefe.
En latín vulgar, me pregunto ¿Loco totus amentes et soy yo? (¿Todos están locos o el loco soy yo?)
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