viernes, 25 de enero de 2019

La “guerra” que nos espera

El maravilloso y misterioso mundo de las neuronas (foto de Internet)
El maravilloso y misterioso mundo de las neuronas
(foto de Internet)
Estas rebeldes neuronas que no se resignan a su jubilación (o definitiva extinción), que se creen en edad de procrear, inundan mi cerebro de non natas ideas con la clara vocación de ver la luz literaria, sin darse cuenta de que son criaturas deformes que a no ser por mi radical anti abortismo allí quedarían para siempre; no obstante, como su “figura” no llegará a vivir más allá de 24 horas desprendida del seno “paterno”, por carecer de los rasgos que la puedan habilitar en el mundo de la creación intelectual a ser algo más que un feto adefesio, me aventuro a seguir adelante con mis demasiadas onerosas reflexiones (para quienes se tomen la molestia de leerlas) y me retrotraigo a las opiniones vertidas hace unos meses.
En el verano de 2018, tras la irrupción de Pedro Sánchez en la presidencia del Gobierno y retractamiento a la promesa de que la moción de censura era solo para convocar elecciones generales inmediatas, escribí en diversas ocasiones en este foro que su permanencia (la de Sánchez) al frente del Consejo de Ministros durante los dos próximos años daría alas a los separatistas y previsiblemente les tendría que “pagar” el favor recibido de auparle a un cargo para el que carece de categoría personal y legitimidad ética, algo distinto a la legitimidad política y jurídica que esgrimen las fuerzas izquierdistas. Pagos parciales ya se han hecho (acercar a los presos políticos a cárceles catalanas, entregar TVE a Podemos, ir “de la mano” con PNV en la elaboración de un nuevo ESTATUTO-CONSTITUCIÓN del semi estado independiente de EUSKADI, además de comprometerle la entrega del control de Prisiones para este mismo año 2019, proclamar con claridad y precisión que el “conflicto” en Cataluña es político y no judicial, que tiene que ser resuelto entre los propios catalanes –sin intervención del resto de los españoles–, las “presiones” mediáticas sobre el Tribunal Supremo respecto de la instrucción sumarial de la causa del “procés”, autorizar a los Mossos a comprar armas de guerra, cosa que había prohibido el PP de Rajoy, etc.), pero que no ha podido culminar hasta el momento (el pago total) por la firme postura de los magistrados del TS y de los fiscales encargados del caso (pese a tener una nueva “jefa”, de la onda socialista) que se han empeñado en llevar a los rebeldes al banquillo y someterles a juicio por el delito de rebelión, pese a las dudas existentes sobre si los hechos a juzgar constituyen tal ilícito penal como expliqué en mi artículo “ESPAÑA INDEFENSA”.
También adelanté en mis escritos veraniegos que estando los presos preventivos en “casa” (cárceles de Barcelona y Gerona) iba a ser muy “difícil” sacarlos de allí y llevarlos a Madrid para estar presentes en las dependencias del Tribunal Supremo durante el tiempo (meses) que durará el juicio. Me aventuré a suponer que el gobierno socialista podía llegar a presionar al Alto Tribunal para que se desplazara a Barcelona en cuya ciudad podía actuar al tener jurisdicción territorial sobre esa región, o que se celebrar por video-conferencia... Parece ser que ninguna de esas opciones de “bajada de pantalones” ha fructificado, si es que la llegaron a plantear, ya que el juicio se va a celebrar a Madrid y el TS ha solicitado del Ministerio del Interior que tome las medidas oportunas para el traslado de los presos, lo que ha puesto de los nervios al Gobern que tiene cursada la petición de que sean los “Mossos” quien haga el traslado y no la Guardia Civil.
Los “caramelos Sánchez” (dinero a espuertas para los separatistas) que se están ofreciendo, las reuniones de “Gobierno a Gobierno”, las concesiones verbales de todo tipo, las humillaciones a España con los “lacitos amarillos” en las solapas, los viajes de Torra al extranjero para explicar que Cataluña está siendo reprimida por la antidemocrática, autoritaria y fascista España, la “promesa” implícita de que se indultará a los reos si son condenados por los jueces, la humillante, chulesca y permitida postura del delincuente Puigdemont que dirige desde Bélgica el gobierno autónomo de Cataluña, en el que Torra es un simple pelele, no han servido, sirven ni servirán para solucionar un problema que cada día se hace más gordo por culpa de nuestros actuales gobernantes que han potenciado el “pecado” de los anteriores del PP.
Furgón especial de la Guardia Civil para traslado de presos (Foto de Internet)
Furgón especial de la Guardia Civil para traslado de presos (Foto de Internet)
La “guerra” por el traslado de los presos está a punto de empezar, salvo que el señor Sánchez realice el “gesto político” que le piden los rufianescos sediciosos actuales al frente de Gobern, del Parlament, de los grupos políticos catalanes en el Congreso de los Diputados, así como de instituciones separatistas de todo tipo, incluidas las violentas: una amnistía para los intervinientes en los hechos “políticos” de septiembre y octubre de 2017, es lo único que puede frenar el juicio y el traslado ¿Se atreverá nuestro Presidente? Amnistías se concedieron por “delitos políticos” cometidos antes de la promulgación de la Constitución, en 1976 y 1977; la Carta Magna prohíbe la concesión de “INDULTOS MASIVOS” (hay que darlos “uno a uno”), pero no menciona la posibilidad de que se puedan acordar “AMNISTÍAS” (no lo prohíbe expresamente).
En España se dictó una Ley de Amnistía (46/1977, de 15 de Octubre) que yo me atrevería a decir que está todavía vigente pues la disposición derogatoria de la Constitución no la menciona expresamente y en cuanto a la genérica sobre “aquellas disposiciones que se opongan a lo establecido en esa Carta Magna” no encuentro nada que “se oponga” por cuanto no hay mención a la amnistía en la Constitución, donde solo se evoca el indulto, conceptos jurídicos diferentes: por la amnistía se perdona la comisión de unos hechos considerados a priori delictivos pero que se reconoce que en el momento de aplicarla no lo son por tener un carácter político, haya sido juzgada o no la persona imputada, mientras que con el indulto lo que se perdona es la pena a cumplir por un culpable condenado por el delito existente, perdón que tiene que solicitar el reo (en la amnistía no es necesaria esa petición). Es de suponer que todas estas “sutilezas leguleyas” hayan sido barajadas por los interesados en dar “carpetazo” en tan enojoso tema, aunque sea dejando el trasero al aire al Poder Judicial... Tampoco tiene mayor importancia cargarse uno de los órganos del Estado cuando se persigue la dinamitación del propio Estado por diferentes grupos políticos.
Dejando al margen estas reflexiones jurídicas, veamos lo que dice al respecto (traslado de presos y juicio) la prensa catalana más radical (El Punt Avui)
El periodista Oscar Palau relata la presentación en el castillo de Montjuïc de una multitudinaria “CAMPAÑA PERMANENTE POR EL JUICIO”, por OMNIUM CULTURAL que estima como la más ambiciosa de su historia, para acusar al Estado y plantea movilizarse cada día que dure el pleno en el TS, tanto en Barcelona, como en Madrid y otras ciudades europeas, hasta que se dicte la sentencia; no piensan en defenderse por los hechos que se les imputan sino que atacarán acusando al Estado fascista que impide las manifestaciones democráticas y encarcela a quienes forman parte de ellas.
Los que manejan a la gente y el dinero del separatismo (Foto de Internet)
Los que manejan a la gente y el dinero del separatismo (Foto de Internet)
Se etiquetarán con el lema “YO ACUSO” y pretenden hacer de altavoz para que se entere todo el mundo de la lucha pacífica del soberanismo y su denuncia de las vulneraciones de los derechos fundamentales, como la libertad de expresión, reunión o manifestación, realizados por España que se opone a su “sagrado derecho a la autodeterminación”.
Como hay “dinerito fresco” (esto lo decimos nosotros) en las arcas del Gobern, piensan llevar sus protestas y reivindicaciones a la Puerta del Sol y la Castellana, en Madrid, al Parlamento Europeo en Bruselas, al Tribunal de los Derechos Humanos de Estrasburgo, a la sede de la ONU en Ginebra y a cualquier ciudad de los cinco continentes donde exista colonia de catalanes. En “casa” (léase Cataluña) el tinglado promete ser de padre y muy señor mío: acciones de soporte a los familiares de presos y huidos, la presentación de más de mil juicios populares, actos abiertos con expertos en derechos humanos para descartar los argumentos del Estado contra los encausados; todo ello a la vez que se potenciará una campaña de comunicación en las redes sociales y en carteles informativos en buzones, fachadas y vías de comunicación, reparto gratuito de diarios en papel en los que se rebatirán el relato que quieran imponer los unionistas, se pedirá a la ciudadanía colgar de los balcones de sus casas banderas separatistas y que todos tengan en cuenta que el juicio a celebrar es contra dos millones de catalanes que votaron a favor de la república.
Desde este Diario se llama a los separatistas a lanzarse a la calle (Foto de Internet)
Desde este Diario se llama a los separatistas a lanzarse a la calle (Foto de Internet)
En el mismo diario (Punt Avui) el periodista Emili Bella informaba de que el Consell Nacional de Cataluña en Comú (el PODEMOS CATALÁN) había aprobado una hoja de ruta para la elaboración de la Constitución de Cataluña, que encajara dentro del marco de un estado plurinacional (el favorito de Sánchez e Iglesias), previa la reforma de la Constitución española en la que se reconociera a Cataluña como una “nación política” con la facultad de financiarse con una “hacienda propia”. Además, esta rama de PODEMOS, hará una propuesta de ley al Parlament para que pacte con el Estado el reconocimiento de los catalanes a su derecho a ser consultados de forma vinculante sobre su futuro político por la vía del referéndum... ¡¡¡Más de lo mismo!!! Una pesadez, una tozudez, un nudo gordiano tan enrevesado como fácil de romper, según la leyenda.
Y mientras tanto, en esta casa de locos en que se ha convertido España, el cobardica de Puigdemont ha demandado a la Mesa del Parlament ante el Tribunal Constitucional, que tiene mayoría separatista (son de los “suyos”) porque le han retirado la facultad de votar a través de un delegado, mientras que él continúa con su infamia diaria desde Waterloo, mediante esa farsa de ser “presidente en la sombra”, exiliado político y otras mandangas para continuar chupando del bote sin trabajar, mientras Joaquín Torra le muestra su caricaturesca pleitesía personal.
¡Vaya par de “presidentes”! (Foto de Internet)
¡Vaya par de “presidentes”! (Foto de Internet)
Las “guerras” puede saberse como y cuando empiezan pero nunca de qué forma terminarán; los separatistas avisan de cuando y como la van a iniciar, concretamente con un primer acto por el traslado de los presos a Madrid que previsiblemente será antes del 5 de Febrero, fecha fijada para el inicio del Juicio, para seguidamente iniciar una lucha diaria mientras dure el juicio, lucha que piensan trasladar a cualquier ciudad española, europea e incluso mundial, utilizando todos aquellos medios materiales (repito que hay euros para ello) que con tanta maña saben manejar; y mientras tanto, España en manos del PSOE de Sánchez, del PODEMOS de Iglesias, del COMUNISMO de Garzón, de los COMUNISTAS de segunda generación (ERREJON, COLAU y CARMENA), así como de sus propios enemigos ERC, PNV y CONVERGENTES obedientes a Puigdemont... ¡¡¡Pobre España!!! Si no surge un nuevo general Pavía que entre (según la leyenda urbana) a caballo en el Congreso y barra la “tropa” que lo ocupa, esto se va al “carajo”. Ahora estamos en el “carajillo” que no es de Anís del Mono, sino el escalón previo a la hecatombe que nos depara este año 2019 en el que precisamente pasaré a ocupar plaza de octogenario.

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